Cuando
empieces a ver que todo en la vida es al fin y al cabo energía, entenderás
porqué los resultados pueden manifestarse en diferentes cantidades y en
distintas velocidades.
No
todo lo que sucede del mismo modo para diferentes personas. La cantidad y la
velocidad de la manifestación depende de la dinámica de la energía en cuestión.
Cuanto más energía se canaliza en un objetivo mayor y más rápido serán los
resultados. Grandes logros en poco tiempo son el resultado de la masiva energía
que se utiliza durante un período concentrado de tiempo.
Nuestros
pensamientos crean la realidad pero no todos nuestros pensamientos se
manifiestan con la misma intensidad y de acuerdo a ella se producirán las
correspondientes manifestaciones en la realidad.
Cuando
quieras experimentar ciertos deseos más tangibles y permanentes, deberás centrar
tus pensamientos en ellos experimentándolos como parte de tu vida y no
centrarte es su falta o carencia.
Cuanto
más respires, sueñes y vivas tus ideales, más rápido y con más fuerza que van a
aparecer en tu mundo. Una de las formas de hacer esto es visualizando, otra es
actuando como si ya fueras o tuvieras eso que quieres, etc.
Cuanto
más atención canalices en una zona deseada, conseguirás resultados a un ritmo más rápido. La atención
mental es la vida. En lo que se centran en donde se le da la vida. La
negligencia provoca que nunca alcances lo que quieres.
Nuestros
proyectos exitosos empezarán a decaer y cuando no los tengamos en el centro de
nuestra atención durante un tiempo. Para mantener vivos nuestros sueños,
debemos seguir alimentándolos con nuestros pensamientos y acciones.
Es
momento en que la humanidad de un paso evolutivo y las personas comiencen no
solo a reconocer su poder sino a aprender a usarlo.
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